Faja postparto: ventajas e inconvenientes

Tras dar a luz, muchas mujeres se plantean empezar a utilizar faja postparto para reorganizar los órganos abdominales y reducir la hinchazón. En este post te hablamos de esta faja y de sus ventajas y desventajas para que decidas si llevarla o no teniendo toda la información a tu disposición.

Ventajas de la faja posparto

Son muchos los expertos que las recomiendan estas fajas tras el parto por las siguientes razones: 

• Llevarla permite hacer ciertos movimientos que podrían resultar dolorosos después del parto, dándote más seguridad y comodidad, especialmente tras una cesárea. 
• Ayuda a disminuir el dolor de la columna y da estabilidad a la espalda. Este dolor puede estar causado por la debilidad de los músculos abdominales, por lo que la faja contribuye a mantener una buena postura. 
• Después de todos los cambios físicos que se experimentan durante el embarazo, el uso de la faja ayuda a que el útero, los órganos y la piel se reorganicen y vuelvan al estado en el que estaban antes del embarazo. Además, evita la diástasis abdominal, o separación de los músculos que componen la pared abdominal. 
• A nivel estético, favorece una figura más estilizada, algo que a algunas mujeres les puede servir de ayuda para sentirse mejor y mejorar su autoestima. 

En caso de que decidas utilizar la faja posparto, debes tener en cuenta que la puedes usar, como máximo, durante tres meses. A partir de entonces, tus músculos necesitarán fortalecerse gracias a ejercicios físicos. 

Inconvenientes del uso de la faja

Como decíamos, hay opiniones encontradas respecto al uso de la faja, así que también queremos explicarte las desventajas de su uso: 

• Aunque a nivel visual nos parezca que el abdomen está más plano y te vas recuperando, la realidad es que el uso de la faja puede provocar la pérdida de tono en la musculatura. Es decir, mientras la faja posparto hace de sostén y estabilizador, no permite que estas funciones las realicen los músculos abdominales por sí mismos, por lo que éstos pueden acostumbrarse a no hacer esta función. Al perder parte de su trabajo, es muy probable que se debiliten aún más. Si quieres fortalecer la zona abdominal durante el posparto, lo más recomendable es que realices ejercicios específicos para la zona. 
• Llevar faja mientras haces ejercicio podría dificultar el flujo sanguíneo. 

Tipos de faja

Si necesitas utilizar la faja posparto para un momento puntual, o si tu médico te ha recomendado utilizarla, debes saber que existen diferentes tipos, así que antes de comprar, prueba los diferentes modelos que existen para saber cuál es el más cómodo para ti. 

Por regla general, los más cómodos para el día a día son aquellos que permiten quitar la faja por partes, ya que así no tienes que quitártela y ponértela toda cada vez. No olvides comprobar de qué material está hecha para escoger uno que sea transpirable. 

Algunos de los tipos que existen son:

• Faja sin piernas de cintura alta.
• Faja con sujetador que te permite amamantar.
• Faja con piernas con enganches.
• Faja con velcro.

La talla de la faja varía en función de la estructura física de cada mujer. No obstante, es importante que te sientas cómoda con ella puesta y que no te apriete demasiado la zona abdominal. 

En conclusión, el uso de la faja durante el posparto es una decisión personal que debes tomar tú misma con la recomendación y explicación de tu médico. 

Eso sí, decidas utilizarla o no, es muy importante que te centres en fortalecer, antes que nada, el suelo pélvico, pues si empiezas a ejercitar el abdomen teniendo el periné debilitado, puedes provocar lesiones que será más difícil solucionar. Puedes empezar haciendo ejercicios específicos de suelo pélvico y, más adelante, seguir tonificando la zona abdominal con actividades como los ejercicios de Kegel o hipopresivos. Este tipo de ejercicios, además de ser beneficiosos para el suelo pélvico y el abdomen, también ayudan a rebajar la hinchazón y recuperar la figura.