MOTRICIDAD FINA: Ejercicios para su estimulación.

  • 11 de Julio del 2022
  • 4 min de lectura

La motricidad fina, como veremos a continuación forma parte importante del desarrollo de cada niño. 

El termino motricidad o motilidad, se refiere a los movimientos que realizamos de forma coordinada con la corteza cerebral y las estructuras secundarias que lo modulan, por lo tanto, está involucrado todo el sistema locomotor. La motricidad en sí, se divide en motricidad gruesa y fina.

La motricidad gruesa es aquella donde se involucran grupos extensos de músculos, como correr, andar, juegos con balones, saltar, bailar, etc. Mientras que la motricidad fina esta más relacionada con movimientos más delicados y más controlados como escribir, coger pequeñas cosas con el índice y pulgar (haciendo la pinza con la mano), la precisión, etc.

El desarrollo de la motricidad fina puede lograrse por medio de ejercicios específicos donde se involucra precisión, relación ojo mano y movimiento controlado. 

Si bien, en el mercado existen muchos juegos o juguetes didácticos que ayudan a desarrollar estas habilidades, hoy queremos enseñarte que puedes hacer desde casa para potenciar la motricidad fina.

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Juegos o ejercicios de motricidad fina para niños, que puedes realizar en casa:

  • Torre de tacos: quizá de los más típicos, si bien este juego conlleva el uso de motilidad gruesa, también requiere el desarrollo de la motilidad fina, puesto que el lograr mantener más de 3 tacos formando una torre, requiere de movimientos con precisión que no terminen por derrumbarla. 
  • La pesca: Consiste en crear en fieltro pequeños peces y colocarles un imán pequeño, por otro lado, formar la caña con un patillo y una cinta con imán en la punta, de modo que al colocar en el suelo los peces se puedan coger con la caña. En este juego se involucra movimientos de precisión y de estimulación visual - manual.
  • Emociones: Consiste en crear tarjetas o nombrar diferentes emociones (amor, tristeza, rabia, felicidad, etc.) y que el niño usando su rostro interprete cada una de estas emociones; aquí se desarrolla la expresión corporal y el dominio de los músculos faciales, además se aprende a reconocer el cambio de estado físico ocasionado por cada emoción.
  • Juego de gomas: un juego simple con gomas de colores y un vaso o tubo fino. Se trata de que se estire la goma y se coloque por fuera del vaso o tubo, aquí se trabaja la relación visión - mano y comprensión del espacio.

motricidad fina ejercicios juego

  • Los puntos: sobre un papel dibuja puntos formando la silueta de alguna figura simple de alguna forma geométrica y se con un lápiz de color el niño debe trazar líneas uniendo los puntos. Se maneja la destreza manual e indirectamente este ejercicio favorece la escritura.
  • La hucha: con un cuchillo y bote plástico perfora la tapa haciendo una ranura y luego el niño debe introducir monedas, al coger las monedas se desarrolla la pinza.
  • Tendedero: usa algunos cordones de algodón (como estambre por ejemplo) y pégalos de extremo a extremo a una caja de cartón, puedes usar una caja de zapatos, y dibuja algunas ropas en cartulinas de colores o fieltro, puedes aprovechar para que el niño lo recorte, luego con pequeñas pincitas el niño debe colgar las piezas en el tendedero; para incrementar la dificultad puedes pedirle que las cuelgue por colores o tipo de prendas. En este ejercicio se estimula la relación viso mano, la precisión, la pinza y el manejo y reconocimiento del espacio.
  • Collar de macarrones: Solo necesitamos un cordón y macarrones, se trata de introducir el cordón por el agujero de los macarrones uno a uno, puedes añadir atractivo al juego haciendo que el niño pinte de colores los macarrones. Estamos estimulando la pinza, relación ojo mano y la precisión.
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Estos son algunos de los juegos más fáciles y económicos de realizar, además en casi todos los casos son reutilizables, como puedes ver las oportunidades son muchas y las variantes mucho más, puedes dejarte llevar por tu imaginación y el uso de la lógica para agregar dificultad, variantes e incluso inventarte un nuevo juego. 

Lo importante es que el ejercicio se lleve a cabo en forma de juego para que el niño esté dispuesto y se sienta atraído a realizarlo. La innovación al agregar dificultad seguramente haga que el niño se sienta más motivado a hacerlo.

Cuando realices estas actividades, primero realiza una demostración de cómo funciona el juego, pero deja que el niño lo repita solo, acompáñale con indicaciones claras y precisas, sin quitarle la oportunidad de realizar el cometido por sí mismo. Mantente involucrado y atento a lo que está haciendo, ¡motívale y celebra sus logros!.

Dibujar, colorear y moldear pastas como la plastilina también sirven como ejercicios de motricidad fina.

¡Puedes buscar más ideas en la web o en bibliotecas locales, ánimo!

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