Alopecia infantil: causas, tipos y tratamiento

¿Has notado que a tu pequeño se le está cayendo mucho el pelo? No te alarmes. Aunque es poco frecuente, los niños también pueden padecer alopecia o una caída del cabello temporal. Por eso, en este artículo, te contamos con qué tipo de alopecia infantil te puedes encontrar y cuáles son sus causas.

Causas de la caída del cabello en niños

La caída de pelo es algo natural y habitualmente pasa desapercibida. La caída de pelo suele situarse en unos 100 cabellos diarios. Pero cuando esta caída es más acusada, ya sea generalizada o localizada, hablamos de alopecia o calvicie. Esta problemática no es algo que suela afectar a los menores y, cuando ocurre, estos tienen muchas probabilidades de recuperarse.

No obstante, hay que tener en cuenta que, detrás de una alopecia infantil, puede haber distintas causas. En ocasiones, se produce simplemente por estrés o por fenómenos estacionales propios de la primavera o el otoño. Pero en otros casos, nos puede estar indicando que hay otras problemáticas de fondo a las que hay que prestar atención: hongos, hipertiroidismo, lupus eritematoso, déficit nutricional o algún síndrome genético.

Tipos de alopecia infantil

En función de las posibilidades o no de recuperación, podemos clasificar la alopecia en:

1. Alopecia cicatrizal: se produce una destrucción de los folículos, la zona de la piel donde se concentran las células que dan lugar al pelo. Este tipo de alopecia es permanente.
2. Alopecia no cicatrizal: los folículos sufren cambios pero no se destruyen. Con un tratamiento adecuado, es reversible. 

También podemos clasificar la alopecia según los mecanismos que la producen. Las más frecuentes son:

• Alopecia areata: se trata de un proceso inflamatorio provocado por una bajada de defensas. Esto produce una inflamación de los folículos pilosos y una caída del cabello en parches. También puede causar rojez y escozor. En este caso, es conveniente reforzar las defensas de los más pequeños.

• Alopecia por tracción: es común en la adolescencia y tiene su origen en un estiramiento reiterado del pelo. Se puede producir por el uso continuado de gomas de pelo muy apretadas o incluso si los niños tienen el tic de arrancarse el pelo. 
• Alopecia occipital: habitualmente la padecen los recién nacidos y tiene que ver con la evolución del ciclo del crecimiento del pelo o ciclo folicular en la etapa fetal y neonatal. Esto se revierte poco a poco, especialmente a partir del duodécimo mes de vida. 
• Alopecia triangular congénita: es la ausencia de cabello en los laterales de la cabeza en forma de triángulo. Algunos niños nacen con este tipo de alopecia, que es permanente pero se puede disimular con el cabello superior.
• Efluvio telógeno o anágeno: el cabello se cae como consecuencia de factores emocionales, enfermedades endocrinas o crónicas, estrés o estados depresivos, déficits nutricionales, fármacos, vacunas, intervenciones quirúrgicas, etc. Es una de las alopecias más frecuentes y su tratamiento consiste en tratar la causa que la provoca. De hecho, es bastante común que esta caída del cabello se produzca también en las mamás después del parto.
• Infección por hongos: es una de las causas principales de la alopecia infantil. La caída del cabello es temporal y se produce por una infección del cuero cabelludo, muchas veces relacionada con el contacto con animales. Esta finaliza tras la eliminación de la infección pero se deben tener precauciones porque es contagiosa. 
• Motivos genéticos: son causas hereditarias y suelen aparecer a partir de la adolescencia o en la edad adulta.

Tratamiento

En aquellos casos en los que la caída del cabello sea no cicatrizal y reversible, el tratamiento a seguir variará según el tipo de alopecia y este debe ser indicado por un especialista en dermatología. 

En otros casos como en los efluvios, por ejemplo, la recuperación se puede producir de forma espontánea y natural una vez que el pequeño supere la enfermedad o el motivo que ha ocasionado la caída del pelo. De todos modos, para intentar acortar el proceso, se pueden usar suplementos ricos en vitaminas del grupo B y algunos aminoácidos como la cisteína.

Si has notado que tu pequeño está experimentando una caída acusada del cabello, te aconsejamos consultar con un especialista para encontrar la causa y buscar el tratamiento más adecuado.