Una buena manera de pasar las vacaciones es acudiendo a un campamento de verano, que ofrece muchos beneficios para el desarrollo de los niños. Si este campamento, además, es de idiomas, tu hijo podrá mejorar el aprendizaje de una segunda lengua.
Las vacaciones de verano de los escolares son más largas que las de los adultos, por lo que los padres deben buscar una buena alternativa para sus hijos durante las semanas de verano que ellos trabajan. Una opción muy recomendable siempre ha sido los campamentos de verano ya que permiten a los niños madurar, fomentar la interacción social, hacerse más responsables, divertirse y aprender actividades nuevas.
Desde hace unos años, además, son muy comunes los campamentos de idiomas en los que se procura mejorar, mediante la inmersión en una segunda lengua, el aprendizaje de los idiomas, generalmente del inglés. En estos campamentos es normal que solo se hable ese segundo idioma para que el niño pierda el miedo y se acostumbre a hablar otra lengua. Es una manera divertida y muy eficaz de mejorar el aprendizaje de un idioma.
Además, los campamentos de idiomas presentan otras muchas ventajas para los niños:
- Aprenderán casi sin darse cuenta ya que no se llevan a cabo aburridas clases teóricas, sino que se juega, se cantan canciones, se habla en ese idioma,… Es la manera más fácil y divertida.
- Desarrollarán sus habilidades sociales, conocerán nuevas culturas, gente diferente, etc.
- Aprenderán a trabajar en equipo y a compartir.
- Harán ejercicio al aire libre y llevarán a cabo actividades distintas como senderismo, manualidades, etc.
- Estimularán su creatividad y su imaginación.
- Se harán más responsables y maduros al no tener a sus padres al lado para que les hagan todas las tareas o les ayuden si algo no sale bien.
- Conocerán mejor la naturaleza y a respetar el medio ambiente.
- Aprenderán valores esenciales como la amistad, el respeto, la tolerancia, el valor, la autosuperación, etc.
Fuente:
- Álava, Silvia (2014), Queremos hijos felices. Lo que nunca nos enseñaron (de 0 a 6 años), Madrid, Actitud de Comunicación.
Etapa vital
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