Crisis de los 4 Meses: La falsa crisis y la regresión del sueño

La crisis de los 4 meses, resulta quizá una de las más marcadas durante la maternidad. Los bebés durante la infancia temprana (primer año de vida) atraviesan numerosas crisis de lactancia y de sueño, se encuentran en constante desarrollo por lo que su cuerpo demanda más y mejor calidad de leche a la vez que se acostumbra a nuevas rutinas, algunas de ellas se presentan de manera natural, es decir, que los cambios ocurren por necesidad fisiológica y no por imposición.

Los bebés a los 4 meses cambian sus tiempos de sueño, especialmente por la noche, comienzan a despertar con mayor frecuencia, incluso si el bebé ya había alcanzado a dormir del tirón es muy probable que se despierte un par de veces cada noche. Todo se debe a su desarrollo motriz y es normal, de hecho, ocurrirá nuevamente con seguridad alrededor de los 6 y 8 meses y luego entre el 10mo y 12avo mes.

A esta falsa crisis de los 4 meses se le conoce mejor como regresión del sueño, y ocurre porque tu bebé intenta dominar nuevos movimientos, sentarse, darse la vuelta, incorporarse, etc. Cuando logre dominar correctamente la nueva habilidad el sueño volverá a la normalidad, así que no debes preocuparte demasiado si no más bien ayudarle a dormir mejor.

¿Cómo ayudar al bebé a tener mejor sueño?

• Bajo ningún concepto le obligues a mamar o tomar el biberón, ciertamente lactar es una actividad que aparte de saciar a los bebés les da calma, pero, como ya hemos dicho esta “crisis” nada tiene que ver con la alimentación.
• Mantén las rutinas acostumbradas, durante estos días es importante que el bebé no pruebe métodos distintos a los ya establecidos. Las rutinas para los niños son super importantes, les brindan seguridad y confort, por eso mientras transitan por la ansiedad de una crisis es mejor no incorporar nuevas rutinas.
• No realices cambios en su alimentación, en especial la nocturna. No es verdad que aumentar las tomas o introducir cereales lo hará dormir más o mejor en esta etapa.
• Dale unos minutos a solas para que se calme, si no logra hacerlo por sí mismo, ofrécele algunas palmitas o caricias con él dentro de su cuna, no es bueno que lo cojas en brazos; no se trata de crear malos hábitos, solo de superar la etapa sin desmontar ruinas preestablecidas.
• Valora el darle el chupete para dormir, puede ser de gran ayuda ya que tiene efecto tranquilizador en los bebés.
• Mantén la calma en todo momento, se sabe que estas crisis son extenuantes, pero duran poco, y tu bebé volverá a dormir sin problemas. Paciencia.

La regresión del sueño entonces es una etapa de transición donde tu bebé estará un poco irritable y podrá dormir por escasos lapsos de tiempo; es posible que si le ofreces comer lo rechace o se muestre nervioso y esto es porque verdaderamente no tiene hambre, está variando los hábitos de sueño por lo que le costará más dormir siestas y por la noche. Ten en cuenta que si le das cariño él seguramente se tranquilice y vuelva a dormir pues con tu presencia y afecto será suficiente.

Los bebés de 4 meses necesitan dormir entre 12 y 15 horas al día, con lo cual si tu bebé durmió poco durante la noche es posible que esté somnoliento durante el día siguiente, permítele dormir y recuperar el sueño perdido y haz tú lo mismo si te es posible.

Las rutinas que tenias establecidas a la hora de dormir y a la hora de las siestas mantenlas en la medida de lo posible, para el bebé servirá como indicador y aviso de que es la hora de descansar y esto será beneficioso durante la crisis de los 4 meses.

La crisis de regresión del sueño por la que atraviesa el bebé no es causa de visita al pediatra, sin embargo, debes tener en cuenta que será necesaria su intervención si el bebé está durmiendo realmente poco (menos de 10 horas por día); si sientes grandes estados de depresión o ansiedad debido a la falta de descanso, si la crisis se prolonga más de un par de semanas, si el bebé pasa a dormir demasiadas horas (18 o más) o si notases que baja de peso.