Embarazo deseado y tristeza: por qué sucede y cómo superarlo

En nuestra sociedad se idealizan algunas experiencias en la vida de la mujer, como la del embarazo. Sin embargo, no todas las mujeres viven esta etapa con plena felicidad, aunque el embarazo sea deseado. Los cambios hormonales y físicos, las molestias, dudas, miedos y expectativas pueden afectar al estado de ánimo provocando tristeza en la futura madre. ¡Tener sentimientos encontrados durante la gestación es mucho más habitual de lo que piensas! 

No obstante, es importante que sepas identificar tus emociones y reconocerlas sin sentirte culpable para poder empezar a disfrutar de este momento con buena salud física y mental, y también para favorecer el bienestar de tu futuro hijo.

Hay que diferenciar entre tristeza y depresión

La tristeza y la depresión no son lo mismo. De hecho la tristeza es uno de los síntomas de la depresión, pero no el único.

Aunque se trate de un embarazo deseado, la tristeza durante la gestación es bastante habitual. Los cambios de humor son absolutamente normales y frecuentes en la gestación, especialmente en el primer trimestre de embarazo y también en las últimas semanas antes del parto.

Los episodios de tristeza pasajera se alternan con los de alegría y buen humor. Algo distinto a lo que ocurre cuando nos encontramos ante una depresión. 

La depresión en el embarazo es una afección psicológica que presenta una sintomatología más amplia y severa que incluye sentimiento de tristeza persistente, pérdida del apetito, cambios en el patrón de sueño, falta de líbido, apatía y desgana. Estos síntomas suelen achacarse al estado de gestación y pueden confundir al médico y a la futura mamá. 

Es importante estar alerta a otros síntomas como una baja autoestima, ansiedad excesiva y constante relacionada con el bebé, desatención del cuidado prenatal, desinterés por realizar actividades que antes eran bien recibidas, rechazo al consuelo y pensamientos muy negativos.

Ante una situación de depresión, es necesario buscar ayuda profesional para recuperar y mantener un buen estado de salud física y psicológica, tanto de la madre como del futuro bebé.

Al futuro bebé le afecta tu estado de ánimo

El impacto emocional incide en la actividad de las neuronas, dando lugar a la síntesis y liberación de sustancias químicas que, a través de la circulación sanguínea, llegan y afectan al futuro bebé.

El feto dentro del útero materno está íntimamente conectado con la futura mamá y su estado de ánimo. Si la gestante está alegre y se siente bien, su cerebro genera endorfinas, las conocidas como hormonas de la felicidad, que pasan a través de la placenta y producen al futuro bebé una sensación de bienestar. Cuando se da el caso contrario y la mujer experimenta sentimientos y emociones negativas se liberan otras sustancias químicas asociadas a la tristeza, la ansiedad o el estrés que afectan al feto.

Son varios los estudios sobre cómo el estado emocional de las futuras madres tiene consecuencias en el desarrollo físico y cognitivo del bebé y en su futuro estado emocional.

Causas por las que puedes sentir tristeza durante tu embarazo deseado

Son diversas las causas que pueden motivar la aparición de un sentimiento de tristeza durante la gestación. Te las explicamos.

• Cambios hormonales. Durante el embarazo, el aumento de la producción de algunas hormonas, como la progesterona y el estrógeno, ocasionan cambios muy importantes que afectan a otras hormonas y sustancias químicas relacionadas con el estado de ánimo, como la serotonina y la dopamina. La alteración de los niveles hormonales afectan al estado de ánimo y pueden producir tristeza y decaimiento. 
• Impacto psicológico. La ilusión por ser madre no evita el sentir incertidumbre ante la nueva situación, tanto durante la gestación como el el parto y también de cara al futuro.
• Ambivalencia afectiva. Los sentimientos contradictorios de alegría y tristeza o confianza e inseguridad son experimentados por más de la mitad de las futuras mamás durante su embarazo. Esta polarización emocional es lo que se denomina ambivalencia afectiva.
• Sentimiento de culpa. La ansiedad por cuidarte bien en el embarazo a menudo conlleva la sensación de estar fallando en algo, cuando, normalmente, es solo una percepción errónea de la futura mamá. 
• Molestias del embarazo. Las náuseas, los vómitos, las piernas hinchadas, la torpeza de movimientos o la lumbalgia en el embarazo pueden afectar el estado anímico de la mujer.
• Cambios en el cuerpo. Los cambios provocados por el embarazo pueden hacerte sentir mal con tu imagen, sobre todo en las últimas semanas de gestación.

¿Cómo superar la tristeza?

Dejar atrás el sentimiento de tristeza y recuperar un mejor estado de ánimo comienza por la comprensión y aceptación de tus emociones. Los cambios de humor y las emociones, positivas y negativas, son normales durante la gestación. Ya conoces las razones por las que, aunque sea un embarazo deseado, la tristeza puede aparecer. Entenderlas y aceptarlas es el primer paso para conseguir superar la tristeza.

Te damos algunas recomendaciones que pueden ayudarte en este proceso:

• Apóyate en las personas de tu entorno. Expresa cómo te sientes, sin culpabilizarte ni sentir vergüenza. No estás sola ni tienes que responsabilizarte de todos los preparativos. Delega en la pareja, la familia o los amigos. Seguro que estarán encantados de ayudarte. 
• Organiza actividades junto a tu pareja y comparte experiencias con ella. 
• No te presiones por hacerlo todo perfecto. Relájate, lleva una dieta equilibrada y saludable y sigue los consejos de la matrona y el médico sin agobiarte.
• Haz alguna actividad física adecuada. El ejercicio durante el embarazo es un gran antídoto contra la tristeza. Pilates para embarazadas, yoga, caminatas al aire libre y paseos son buenas propuestas. Mantente activa y aprovecha para relacionarte con otras futuras mamás. Verás cómo lo ves todo de otra manera.
• Dedícate tiempo y mímate. Regálate momentos que te apetezcan, retoma aficiones, cuídate para verte guapa y sentirte bien.

Los meses de gestación son un periodo de labilidad emocional. Los importantes cambios hormonales y físicos pueden afectar a la futura mamá. Incluso ante un embarazo deseado, la tristeza no es un sentimiento extraño. Aceptarlo y actuar en consecuencia es la mejor forma de superar este sentimiento temporal.