Si estás embarazada o acabas de adentrarte en la etapa del posparto o puerperio es posible que ya hayas escuchado el término «loquios».
Durante esta etapa, el cuerpo de la mujer experimenta cambios para volver a la normalidad tras el periodo de embarazo y el parto. El sangrado postparto es parte de este proceso y es completamente natural.
Sin embargo, también lo es que tengas muchas dudas sobre el tema o que no te haya quedado del todo claro en qué consisten o porqué se producen los loquios. En este artículo tratamos de arrojar luz a tus dudas hablando en profundidad sobre este tema tan importante en el posparto.
¿Qué son los loquios?
Los loquios son sangrados vaginales que se producen en la etapa del puerperio o cuarentena postparto. Sirven para eliminar los restos del embarazo y el parto y se dan independientemente del tipo de parto, vaginal o por cesárea.
Son parte del proceso fisiológico natural a través del cual el útero vuelve a su estado normal, expulsando restos de endometrio y cualquier tejido placentario residual que haya podido permanecer en el mismo tras el parto.
Ya que lo que se expulsa son restos procedentes del útero, el color, composición y cantidad de sangrado va variando a medida que pasan los días.
En las primeras horas tras el parto es cuando se producirá el mayor sangrado que, por lo general, es más abundante que una regla normal. Además, se intensificará o producirá principalmente con los movimientos y al levantarte.
Tipos de loquios
Según el color y la intensidad del sangrado, los loquios se clasifican en:
- Loquios rojos o rubra: son los primeros loquios tras el parto, duran de 3 a 5 días y se asemejan a una regla abundante, pues son de color rojo brillante debido a que contienen mucha sangre. También pueden contener coágulos, pequeños restos de tejido placentario, de unto sebáceo (vérnix caseosa) o lanugo.
- Loquios serosos: se producen a partir del cuarto o quinto día tras el parto hasta el décimo día posparto. Respecto a los loquios rojos o rubra, los loquios serosos van perdiendo color e intensidad. El sangrado irá variando desde un rojizo, pasando por tonos rosáceos o marrones, hasta volverse casi de un tono amarillento. Además, este sangrado será menos abundante y espeso que los loquios rubra.
- Loquios blancos o alba: tras los primeros 10 días el sangrado se vuelve mucho más escaso. Se denominan entonces loquios blancos o alba y constituyen la última etapa de sangrado posparto, que puede durar hasta el final de la cuarentena. Son de color amarillento u ocre claro.
Cuánto duran los loquios
La duración de los loquios postparto suelen durar entre tres y seis semanas y, al igual que la recuperación tras el parto, no es igual en todas las mujeres, pudiendo variar bastante de unas a otras.
Cómo mantener la higiene
Te indicamos las pautas sobre cómo mantener la higiene durante el postparto, especialmente mientras duren los loquios, para prevenir irritaciones o infecciones:
- Opta por la ducha en lugar del baño hasta que el sangrado desaparezca totalmente. Tras el parto, el cuello del útero aún continúa algo abierto y podría entrar líquido.
- Después de hacer tus necesidades, lava la zona con agua tibia y siempre de delante hacia atrás para no llevar bacterias de la zona anal a la zona vaginal.
- Evita dejar la zona húmeda tras el lavado. Sécala con toquecitos suaves, sin frotar.
- Mientras los loquios sean abundantes, utiliza compresas posparto 100% algodón para evitar infecciones. A partir del décimo día, cuando aparecen los loquios alba, puedes usar salvaslips, preferiblemente también 100% algodón.
- Debido al riesgo de infección, no debes usar tampones ni copa menstrual hasta que el útero recupere su tamaño habitual, lo que supone un periodo de al menos 6 semanas.
¿Qué otros cuidados debo seguir con los loquios?
Poco a poco, irás recuperando tus rutinas adaptadas a la nueva situación pero, tras el esfuerzo del parto, da prioridad al descanso y a la intimidad con tu bebé.
La cuarentena es un periodo de recuperación y de momentos especiales. Además de la higiene, es conveniente seguir una serie de pautas para minimizar las molestias y el riesgo de complicaciones. Dichas pautas son:
- No realices grandes esfuerzos ni deportes de impacto.
- La ropa interior también debe ser de algodón y no demasiado ajustada.
- Hidrátate correctamente, bebiendo suficientes líquidos, sobre todo, agua. Esto te ayudará a evitar el estreñimiento y las infecciones de vejiga.
- Proporcionarle a tu cuerpo todos los nutrientes que necesita para su recuperación ayudará a que tu organismo transite esta etapa de la mejor forma posible. Por tanto, sigue una alimentación sana y equilibrada, consumiendo frutas, verduras, legumbres y cereales, carnes magras y pescados, lácteos y huevos. Evita frituras, especias y alimentos procesados.
- No mantengas relaciones coitales mientras haya expulsión de loquios.
¿Cuándo preocuparse por los loquios?
Aunque anteriormente mencionamos algunas características y tiempos aproximados, hay que tener en cuenta que estas pautas no son exactas.
Por ejemplo, puede ocurrir que tras varios días sangrando poco y de un color más claro, de repente, un día sangres algo más y el color vuelva a intensificarse. Este «pico de sangrado» es lo que se conoce como «partillo» y suele ocurrir a los quince o veinte días tras el parto, aproximadamente.
Otras variaciones habituales en los loquios o el patrón de sangrado durante el posparto son:
- La intensidad del flujo. La cantidad de sangrado postparto cambia con los cambios posturales. Por ejemplo, se sangra menos mientras se permanece sentada o tumbada que cuando se anda o se permanece de pie.
- Cambios en los loquios postparto con la instauración de la lactancia materna, ya que, aunque puede aumentar el flujo vaginal, favorece la reducción de sangrado en el tiempo. Esto sucede porque la succión del bebé bien agarrado al pecho provoca la segregación de la hormona oxitocina que estimula la contracción del útero y su vuelta a la normalidad.
- La duración del sangrado postparto suele ser algo más extensa en el segundo o tercer embarazo que en el primero debido a que el útero queda más distendido y necesita más tiempo para recuperarse. Igual sucede con los partos múltiples.
Por tanto, si tus sangrados posparto no siguen la evolución exacta que te hemos contado o sus características no son idénticas, no significa que algo vaya mal.
Para saber si existe motivo de preocupación, lo que debes tener en cuenta es, sobre todo, la evolución de los loquios:
- El sangrado no debería volverse muy abundante ni continuo o muy rojo más allá de las primeras horas o días.
- Tampoco debe tener mal olor. De hecho, un olor desagradable puede ser indicativo de una infección.
- Por tanto si existe un sangrado maloliente, así como ante un dolor intenso o fiebre alta (otros posibles síntomas de infección), es importante acudir al médico.
- La presencia de grandes coágulos o la ausencia total de loquios dentro de las dos semanas posteriores al parto también son motivo de consulta, así que no dudes en acudir al médico si te sucede.
Hemorragia puerperal
Si durante el periodo de loquios experimentamos una pérdida excesiva de sangre debemos prestar mucha atención, pues podría tratarse de un una hemorragia puerperal.
De hecho, si el sangrado excesivo se produce conjuntamente con síntomas como respiración acelerada, mareos, náuseas o aumento de la frecuencia cardíaca debes acudir al médico de inmediato.
Por lo general, se considera hemorragia puerperal cuando se produce un sangrado de más de 500 ml tras un parto vaginal o más de 1.000 ml después de una cesárea.
Esta hemorragia posparto o puerperal puede deberse a diferentes causas, como:
- Atonía uterina. Ocurre cuando el útero no se contrae. Es la causa más común y representa más del 82% de los casos.
- Laceración. El sangrado se debe a heridas o desgarros en el útero, el cuello uterino o la vagina.
- Placenta retenida. Sucede cuando la placenta se desprende parcialmente del revestimiento del útero y no es expulsada, provocando que los vasos sanguíneos del útero continúen sangrando.
- Placenta adherida. Se produce cuando la placenta crece con demasiada profundidad en la pared uterina.
- Inversión uterina. Debido a una reversión, una vuelta al revés, del útero.
Durante la etapa del puerperio sigue las pautas indicadas por los médicos y profesionales sanitarios sin inquietarte ni pensar en todo lo que puede suceder.
No se trata de estar todo el tiempo preocupada, sino de conocer tu cuerpo y la etapa por la que estás pasando para poder estar atenta y reconocer cualquier signo anormal que pueda producirse en relación a los loquios.
En caso que experimentes alguno de ellos, mantén la calma y consulta con tu ginecólogo.
Esperamos haber resuelto tus dudas y haberte ayudado a comprender mejor porqué se producen estos sangrados posparto y cuáles son sus características.
Publicado originalmente el 11 de enero del 2017 y actualizado el 23 de enero del 2024
Preguntas frecuentes sobre loquios
Los loquios son sangrados vaginales propios del postparto y duran generalmente entre tres y seis semanas.
Los loquios están formados por restos procedentes del útero y se clasifican en loquios rojos, loquios serosos y loquios blancos.
Cuando son malolientes, se produce un sangrado abundante o notes dolor pélvico, fiebre, mareo, náuseas o respiración rápida.
En el caso de los loquios el sangrado es más abundante y suele haber coágulos. Además, la duración es mayor que la de la regla.
Etapa vital
Referencias
- Huggins-Cooper, Lynn, (2005), Maravillosamente embarazada, Madrid, Ed. Nautilus.
- Cuidados inmediatos después del parto, Matronas y tú, el blog de la FAME.
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