Bebé alta demanda: ¿cómo saber si tu hijo lo es?

Bebé alta demanda, ¿sabes exactamente qué significa este término y qué características tienen estos pequeños? Es posible que tu bebé lo sea, o quizá hayas oído hablar a algún familiar o amigo de los bebés de alta demanda, A continuación, despejamos todas tus dudas.

¿Qué quiere decir “bebés alta demanda”?

El pediatra William Sears fue el primero en usar el término “bebés de alta demanda” cuando comprobó que una de sus hijas requería más atención de lo habitual en comparación con sus hermanos. Comprobó que la pequeña lloraba con más frecuencia, especialmente al notar que la soltaban, y que sólo se calmaba estando cerca de sus padres y el pecho de su madre.

Hay que decir que los bebés de alta demanda son bebés completamente normales, simplemente necesitan más apego, más afecto y más contacto, y lo piden expresándose de la única manera que saben, llorando.

Principales características de los bebés alta demanda

Dejando de nuevo muy claro que no se trata de ninguna patología, los bebés de alta demanda suelen presentar las siguientes características:

• Máxima intensidad. Llorar, quejarse, reír, protestar; todas sus emociones las expresan con la máxima potencia.
• Hiperactividad. Sin entenderla como un trastorno, sino como un rasgo. Su mente es inquieta y necesitan estímulos del mundo constantemente, así que no aguantarán demasiado sentados en el cochecito, sino que pedirán estar en brazos donde puedan ver todo mejor.
• Demandan más alimento. Los bebés alta demanda necesitan succionar con mucha más frecuencia porque para ellos no se trata únicamente de alimento, también les calma.
• Absorbentes. Los bebés de alta demanda nunca tienen suficiente contacto o estímulo, siempre querrán más.
• Más despertares. Duermen menos, se despiertan más y el sueño es muy ligero. Les suele costar dormir solo porque necesitan estar cerca de su madre/padre.
• Especialmente sensibles. Los bebés de alta demanda lloran con facilidad ante la más mínima molestia, ante un ruido estridente o cuando perciben cambios en el entorno y creen que pueden perder el control.
• Necesidad de contacto continuo. Parece que la única forma de que se calmen es estando en contacto continuo con ellos, de día y de noche.
• No aceptan la separación. En relación con el punto anterior, al necesitar tanto contacto, es muy complicado que acepten y/o se calmen con otros cuidadores que no sean su madre o padre.
• Impredecibles. Puede que los padres de los bebés de alta demanda comiencen a conocer a sus hijos y tengan ya controladas ciertas situaciones que le alteran, pero de repente, todo cambia de nuevo, y vuelve la incertidumbre porque lo que les servía para calmarse, ya no sirve.

¿Cómo ayudar a dormir a un bebé de alta demanda?

Ya hemos comentado que una de las características de los bebés de alta demanda es el tener más despertares. Al ser niños con una gran necesidad de contacto físico y succión, junto a un gran interés por todo lo que les rodea, es habitual que presenten dificultades para conciliar el sueño. Además, suelen despertarse temprano y se resisten a dormir la siesta. A continuación te damos algunos consejos para ayudar a dormir a un bebé de alta demanda:

• Establecer una rutina de sueño. Esta medida, que es conveniente para todos los niños, es especialmente importante para los bebés alta demanda. Este ritual puede incluir un baño, un masaje, una canción de cuna, atenuar la luz o coger un objeto especial para él cuando va a dormir. La repetición de estas acciones día tras día le relaja y le ayuda a prepararse para descansar.
• Crear un ambiente adecuado para dormir. La temperatura de la habitación, la luz y el sonido que se percibe. Todo cuenta para promover el sueño. 
• Evitar actividades que lo alteren. La alta sensibilidad de los bebés de alta demanda hace que deban evitarse situaciones que lo estresen y le impidan dormirse. Por ejemplo, lugares demasiado ruidosos y concurridos o luces intensas. 
• Atenderles rápidamente. Si tienen el pañal sucio o tienen hambre, se sentirán incómodos y no se dormirán. Si se les atiende rápido se calmarán antes.

¿Los bebés de alta demanda son más inteligentes?

Esta es una pregunta que muchos padres de estos bebés se plantean: ¿los bebés de alta demanda son más inteligentes? ¿su intensidad, su hiperactividad y la necesidad de contacto contiguo significan que tienen un mayor desarrollo cognitivo? 

No hay duda de que las características de la personalidad y el comportamiento de los bebés de alta demanda requieren de una atención especial. Muestran un alto nivel de energía, persistencia y mucha curiosidad, demandando constantemente atención y estímulo. Ello puede hacer pensar que estas características les llevarán a sobresalir en áreas de conocimiento cuando sean mayores. Sin embargo, no existen estudios científicos que demuestren como son de adultos estos bebés. De hecho, son muchos los factores que determinarán cómo serán: el entorno familiar y social, la forma de crianza y, sobre todo, su propia forma de ser.

Tal y como determinan algunos psicólogos, una mayor capacidad intelectual puede ser una de las explicaciones detrás de los niños de alta demanda, pero no la única. Otros diagnósticos psicológicos como el Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad (TDAH) o los Trastornos del Espectro Autista (TEA) podrían manifestarse con las características de la alta demanda.

¿Cómo gestionar las necesidades de los bebés alta demanda?

Si leyendo las características anteriores, has identificado comportamientos de tu pequeño, ante todo, no te preocupes, pues como decíamos, es un bebé normal, pero, con ciertas necesidades extra.

Éstos son algunos consejos para llevar mejor estas necesidades de tu bebé:

• No te culpes. Que tu bebé sea de alta demanda no depende, en modo alguno, de nada que hayas podido hacer tú. 
• Acepta a tu hijo. Tu bebé es así, y es un niño sano que sabe que siente sus emociones de manera intensa y las expresa. Cuanto antes aceptes la situación, sin intentar cambiarle, antes comenzarás a disfrutar de la crianza, aunque a veces pueda ser dura.
• Vive el presente. Criar a un niño de alta demanda es exigente, por eso necesitas focalizar toda tu energía en lo que necesita de ti ahora, así que no le des vueltas a cómo irá en el futuro o cómo será cuando lleguen ciertas situaciones.
• Aunque es complicado, ten paciencia. Es fácil decirlo, pero no tanto hacerlo. El cansancio, la falta de sueño, el poco margen que permite un niño que reclama contacto y estímulos constantemente, hacen que sea muy complicado mantener siempre la calma y la paciencia, pero intenta pensar en que también es duro para tu bebé, pues sus exigencias se deben a necesidades afectivas reales.
• Intenta no hacer comparaciones con otros niños. Comparando te diste cuenta de que tu bebé era más demandante que otros. Ahora que lo tienes claro y que ya sabes que tu hijo es uno de los bebés de alta demanda, intenta no darle demasiadas vueltas a esto y comparar constantemente lo que hacen los otros y el tuyo en todas las situaciones y circunstancias, pues sólo te aportará frustración.

¿Crees que tu hijo es un bebé de alta demanda? Tanto si este post te ha servido para descartar, como para confirmar que sí lo es, esperamos haberte ayudado y te animamos a que sea como sea tu bebé, disfrutes de esta época tan maravillosa.

Publicado originalmente el 25 de noviembre de 2019, actualizado el 30 de agosto de 2024