Yoga por la mañana: beneficios y ventajas del yoga matinal

Con frecuencia la manera en la que empezamos el día influye notablemente en el desarrollo del resto de la jornada. 

Así, si desde que nos despertamos empezamos a funcionar con prisas y estrés, existen muchas posibilidades de que esa dinámica se mantenga durante todo el día.

Si en lugar de esto optamos por practicar yoga por la mañana, trabajando la respiración y la relajación, será mucho más probable que podamos disfrutar de un día mucho más sereno.

Si, además, tendemos a sufrir estrés, ansiedad y cambios de ánimo el yoga matinal puede ayudarnos a mantenerlos bajo control y adoptar una actitud más tranquila para afrontar nuestra jornada.

El yoga y sus beneficios

El yoga contribuye al bienestar general, ya que puede ayudarnos a mejorar tanto el estado físico como el mental. 

De origen espiritual y milenario, el yoga, que conecta cuerpo, mente y respiración, en la actualidad está ampliamente extendido como modalidad de ejercicio físico y como técnica para reducir el estrés y la ansiedad.

Entre sus beneficios físicos se incluyen la mejora de la coordinación, del descanso, la postura o la flexibilidad, entre otros. 

Como se mencionaba, a nivel emocional y mental, la práctica de yoga resulta útil para reducir el estrés y la ansiedad, así como ayuda para alcanzar un estado de relajación general.

Existen múltiples tipos de yoga, que varían tanto en intensidad como en las técnicas a emplear, que podemos practicar a cualquier hora.

No obstante, cada momento del día reporta unos u otros beneficios. Por tanto, según lo que queramos conseguir o en función de nuestras necesidades nos resultará más efectivo practicarlo a primera hora, por la noche o en algún espacio intermedio del día. 

Si lo que buscamos es reducir la ansiedad, el estrés, los cambios de ánimo o, simplemente, empezar el día con energía y buena actitud, entonces lo mejor será practicar yoga por la mañana. 

Yoga por la mañana para empezar bien el día

Dedicarnos un tiempo a nosotras y practicar yoga por la mañana puede ayudarnos a manejar la ansiedad y los cambios de humor a lo largo del día. 

Adquiriendo una actitud de tranquilidad desde que nos levantamos nos resultará más fácil mantener ese estado de serenidad y relajación toda la jornada. 

Y es que, como se comentaba al inicio, a menudo la forma en la que empezamos el día marca la manera en que este continúa. 

Por ello, hemos de intentar comenzar enfocándonos en el autocuidado, de forma pausada y sin estrés, y practicar yoga por la mañana resulta muy útil para conseguirlo.

Además, esto nos será de ayuda para afrontar el estrés del día y evitar que nos cambie el humor y nos afecte a nivel mental y emocional. 

Es decir, mantener ese estado de tranquilidad desde primera hora hace que podamos gestionar mejor las situaciones que vayan surgiendo, esas que habitualmente nos resultan estresantes o tienden a alterarnos. 

Por la mañana, y cuando el objetivo principal es lidiar con la ansiedad y empezar el día con una actitud tranquila, lo más conveniente es realizar una secuencia de posturas de yoga fluido y suave, con movimientos lentos y coordinados con la respiración.

De esta forma ayudaremos a que la mente y el cuerpo se despierten de forma gradual, activando los músculos y las articulaciones y favoreciendo la respiración consciente, algo que resulta muy práctico para alcanzar un buen estado de relajación. 

Además, el yoga matinal también nos reporta beneficios físicos inmediatos. 

Por la mañana es común despertar con sensación de entumecimiento o algo de rigidez. Si además se da el caso de que hemos dormido en una mala postura, también es posible sentir algún dolor como consecuencia de esto.

Hacer yoga poco después de despertarnos nos ayudará a desentumecer el cuerpo, a recargarlo de energía y a mejorar cualquier dolor o molestia causada por una mala postura durante la noche. 

Ventajas de hacer yoga por la mañana

Además de los beneficios físicos y mentales que nos reporta la práctica de yoga matinal, esta franja del día nos ofrece varias ventajas.

Si nos levantamos temprano para hacer yoga podremos beneficiarnos del silencio y la tranquilidad que nos rodea.

Sin vecinos despiertos, con menos tráfico en la calle y más calma en nuestra propia casa, no tendremos ruidos y distracciones. 

Esto nos facilitará la práctica de yoga y nos permitirá concentrarnos mejor en cada postura que realicemos y en nuestra respiración. 

Además, si tenemos hijos también será un momento idóneo para disfrutar de un tiempo para nosotras sin que nos interrumpan o tengamos que estar pendientes de ellos. 

Al practicar yoga por la mañana también evitamos el ruido mental; ese que se va acumulando a lo largo del día a medida que se nos agolpan en la cabeza tareas, preocupaciones y pensamientos. 

También podemos aprovechar la ventaja de no tener conflictos de horarios. Esto, además de facilitar que nos concentremos en el aquí y ahora, evita que tengamos que posponer o cancelar nuestra práctica de yoga por cumplir con otros compromisos que van surgiendo a lo largo del día.

Como ves, merece la pena madrugar para dedicarte algo de tiempo a ti misma y afrontar el día con ganas y energía.

Esperamos haberte animado a practicar yoga por la mañana y deseamos que te sea útil para reducir los cambios de humor, la ansiedad o el estrés.