Dieta en intolerancia a la fructosa, algunos consejos

Como ya contamos anteriormente, la intolerancia a la fructosa es una reacción adversa del organismo hacia la fructosa de los alimentos. Hay un déficit en el mecanismo de transporte y las células intestinales no absorben la fructosa produciéndose síntomas gastrointestinales. 

Hoy vamos a hablarte sobre la dieta en intolerancia a la fructosa, qué tienes qué comer, qué evitar y si puedes consumir alimentos con fructosa en algún momento… ¡Continúa leyendo! 

¿Qué es la intolerancia a la fructosa? 

La intolerancia a la fructosa es una reacción adversa del organismo hacia la fructosa, es decir que el cuerpo no puede absorber correctamente este azúcar. Se produce por tanto una malabsorción, existe un déficit en el mecanismo de transporte que hace que las células del intestino no sean capaces de absorber la fructosa, produciendo así síntomas gastrointestinales como diarrea. 

Así mismo, la fructosa que no se absorbe puede llegar al colon donde las bacterias naturales del intestino la fermentan y producen gases. Un dato importante a tener en cuenta es que la fructosa, cuando se encuentra junto a la glucosa es bien absorbida, es por esto que las personas intolerantes a la fructosa pueden consumir sin problema el azúcar común (formado por glucosa y fructosa). 

Es importante no confundir la intolerancia o malabsorción a la fructosa con la intolerancia hereditaria a la fructosa o fructosemia, esta es de carácter hereditario y no es una enfermedad común. Esta enfermedad no tiene nada que ver con la intolerancia o malabsorción a la fructosa, que se da por que las células intestinales no pueden absorber total o parcialmente la fructosa. 

¿Cómo es la dieta en la intolerancia a la fructosa? 

El tratamiento para la intolerancia a la fructosa es principalmente la dieta, tratar de limitar o evitar los alimentos con alto contenido en fructosa. Lo ideal es ver qué grado de intolerancia a la fructosa tiene la persona y a partir de ahí hacer “prueba error”. 

Al principio del tratamiento y si la intolerancia es parcial, que se da en la mayoría de casos, se restringirán los alimentos con alto contenido en fructosa, según la evolución se irán re-introduciendo alimentos valorando la tolerancia a los mismos.

¿Qué alimentos están permitidos? 

Para saber qué alimentos están permitidos y cuales no se deben conocer los alimentos que contienen fructosa y de ahí ver la cantidad que estos tienen. El objetivo de la dieta para la intolerancia a la fructosa es principalmente controlar los síntomas de la misma.

Hay que tener en cuenta además, que lo que produce mayor intolerancia es el exceso de fructosa en un alimento, si en cambio un alimento tiene sacarosa u otro azúcar además de la fructosa son mejor tolerados.

Dentro de los alimentos permitidos en la dieta en intolerancia a la fructosa están: 

• Frutas: entre las mejor toleradas están la naranja, el kiwi, la mandarina, el limón, el melón, el plátano, la fresa y la mora. 
• Verduras: entre estas encontramos la acelga, el brócoli, la espinaca, alcachofas, lechuga, escarola, berro, champiñones. 
• Alimentos como carnes, pescados, mariscos, huevos pueden ser consumidos sin problema siempre que sean naturales, sin ser procesados.
• Dentro de los edulcorantes se pueden consumir aquellos que no contengan fructosa, sorbitol ni sacarosa en su composición. 

Alimentos no permitidos 

Principalmente se deben evitar frutas con alto contenido en fructosa como por ejemplo manzana, pera, ciruela, albaricoque, melocotón, higo, cereza y dátiles. 

Además de miel, jalea, mermeladas, chocolates y bebidas alcohólicas como whisky, zumos y bebidas comerciales, productos de bollería, aquellos productos que en la etiqueta ponga “sin azúcar” ya que generalmente tienen fructosa. 

Consejos para mejorar la intolerancia a la fructosa

• Tratar de evitar o limitar el consumo de alimentos con elevada cantidad de fructosa, intentar consumir aquellos con más contenido en glucosa que fructosa. 
• Leer bien las etiquetas de los alimentos, sobre todo los que contienen muchos ingredientes, para cerciorarse de que no contengan fructosa. 
• Realizar remojo de las verduras que se vayan a cocinar ya que la cocción elimina gran parte de la fructosa, no consumir el caldo de cocción de las mismas. 
• Las frutas más maduras son las que más contenido en fructosa tienen. 

Ejemplo de dieta para intolerancia a la fructosa

• Desayuno: Pan con aceite de oliva y tortilla francesa, café con leche. 
• Media mañana: 2 kiwis 
• Comida: Fideos de arroz con calabacín y pollo. 
• Merienda: leche con avena, plátano y canela. Cena: Rape al horno con patata y calabacín. 

Cómo ves estas son pautas generales para intolerancia a la fructosa, siempre se recomienda el seguimiento con el médico y dietista para abordar cada caso particular.